El águila perdicera (Aquila fasciata) es la tercera especie de águila por tamaño que podemos encontrar en Extremadura, solo superada por el águila real y la imperial, está distribuida en el territorio extremeño por aquellas comarcas más montañosas en las que encuentra en sus cortados rocosos buenos lugares de nidificación, aunque también puede anidar en árboles e incluso en estructuras como torretas eléctricas. Se alimenta principalmente de pájaros y mamíferos de tamaño medio, y en menor proporción puede capturar también algunos reptiles.
En Extremadura crían aproximadamente 100 parejas, que forman aproximadamente el 13 % de su población española, y en el Geoparque Villuercas Ibores Jara encuentra un importante reducto para su supervivencia debido a la configuración de valles cerrados, vegetación mediterranea, abundancia de presas y grandes roquedos cuarcíticos.